¡Cuidado con el picante! Aventuras culinarias en el Taj Bangla

 Hoy nos adentramos en un pequeño rincón de la India en pleno corazón de nuestra ciudad. Hablamos del Taj Bangla, un restaurante sencillo pero con un encanto especial que nos ha conquistado. 

Boadas, nuestro intrépido compañero de aventuras culinarias, nos arrastró hasta allí después de una intensa sesión de deporte, caminar, bicicleta, raqueta...buscando reponer fuerzas y saciar su apetito.

El Taj Bangla es un lugar acogedor, con pocas mesas y un ambiente relajado que invita a disfrutar de la comida sin prisas. El personal es amable y atento, siempre dispuesto a recomendar los mejores platos. Y la comida, ¡ah, la comida! 

Una explosión de sabores que te transporta directamente a las calles de la India.

Desde el primer bocado, nos dimos cuenta de que estábamos ante una cocina auténtica y casera. Los samosas, crujientes por fuera y jugosos por dentro; las pakoras de verdura, bañadas en una salsa picante y aromática; y el pollo tandoori, con su carne tierna y marinada a la perfección, fueron solo el comienzo de una experiencia culinaria inolvidable.

Los amantes del picante encontrarán en el Taj Bangla su paraíso. Los platos vindaloo y madras son un auténtico desafío para los paladares más atrevidos. 

Boadas, fiel a su estilo, pidió un plato con un poco de picante, pero el que esto escribe, fiel a sus amigos, puso un toque más de picante, los Gourmets somos así, con el  toque extra de picante, y durante los días siguientes ardió en llamas... (ardimos en llamas)..¡pero volvimos a por más!

Y para los que prefieren sabores más suaves, hay una amplia variedad de opciones: el pollo tikka masala, cremoso y especiado; el paneer tikka, con queso indio a la parrilla; o el bhindi bhaji, con okra salteada.

Los arroces también son dignos de mención. El arroz de pollo, el de verduras y el de pollo tikka son una excelente opción para acompañar cualquier curry. Y para los que buscan un toque más sofisticado, el restaurante ofrece una selección de platos tandoori, cocinados en un horno de barro tradicional.

Un festín para los sentidos

• Samosas: Triángulos dorados y crujientes, rellenos de un delicioso picadillo de patata y guisantes.
• Ceba bhaji: Anillos de cebolla fritos hasta la perfección, con un toque picante que los hace irresistibles.
• Pakores de verdura: Una mezcla de verduras tempuradas y crujientes, perfectas para compartir.
• Pollastre tandoori: Jugoso pollo marinado en yogur y especias, cocinado a la perfección en el tandoor.
• Gambas puree: Gambas salteadas con una salsa cremosa y especiada, un verdadero manjar.
• Pollastre tikka masala: Un clásico de la cocina india, con pollo tierno en una salsa cremosa y ligeramente picante.
• Paneer tikka: Cubitos de queso indio a la parrilla, con un exterior crujiente y un interior suave y cremoso.
• Bhindi bhaji: Okra salteada con especias, un plato vegetariano lleno de sabor.
• Arroz de pollo: Un acompañamiento perfecto para cualquier curry, con arroz basmati cocido a la perfección y pollo desmenuzado.

Y muchos más...

En definitiva, el Taj Bangla es un pequeño tesoro gastronómico que no puedes perderte si eres amante de la comida india. Su ambiente acogedor, su personal amable y su cocina auténtica lo convierten en el lugar ideal para disfrutar de una comida deliciosa y auténtica.

¿Te animas a probarlo?, pero con picante (que la vida necesita estos toques, ante tanta sobriedad)

Cuatro Llamas (Y QUE LLAMAS) y Cuatro Tenedores:

Llamas altas (MUY ALTAS DE FUEGO) y tenedores afilados. Muy buena experiencia en general. Platos con personalidad, técnica bien ejecutada y algún toque de originalidad. Servicio atento y ambiente agradable. Recomendable sin duda.